04 abril 2012

I como Ícaro 1

Veo en las noticias, y con gran cobertura en algunos medios, los desastres causados en el ataque a la embajada del Reino Unido en Buenos Aires por Quebracho.

No me extraña que Quebracho deslegitimize, a través de la violencia gratuita y sin sentido, reclamos justos del pueblo argentino, resultando funcional a la derecha, a quiene se supone "combaten".

Lo que sí me extraña se que en todos estos años (Quebracho nació en los '90, en pleno menemato, y funcionó siempre deslegitimando los reclamos populares) ningún periodista, ninguno de los tantos bravos defensores de la libertad que diariamente nos acribillan el cerebro desde las páginas de papel y las pantallas con sas manos llenas de verdades, haya investigado seriamente quién los financia.

Casi siempre que hay un reclamo popular justo aparecen estos tipos encapuchados y blandiendo la violencia, lo que genera más violencia y el meollo del reclamo queda en la nada, ahogado por las letras sanguinolientas de la crónica de la batalla callejera.

Un investigador de un delito siempre debe preguntarse a quién beneficia dicho delito. En este caso está claro a quién beneficia. Un investigador ahora debería seguir la pista y unir los puntos desde el hecho hasta el autor ideológico.

Pero me estoy acercando demasiado al sol...

1 comentario:

Javier dijo...

Como dirían en la Revista Barcelona, "la agrupación cómico-piquetera Quebracho".